sábado, 19 de abril de 2014

PROYECTOS PLANIFICADOS PARA DESARROLLAR EN EL PRESENTE AÑO LECTIVO EN EL ÁREA DE EDUCACIÓN COMÚN PRIMARIA, TIEMPO COMPLETO.

PROYECTO "VISIÓN - ARTE"
Tercer nivel.

      




FUNDAMENTACIÓN.
El conocimiento artístico – estético constituye un campo del saber humano fundamental para comprender y reflexionar críticamente acerca de nuestra realidad cultural histórico – social y un campo para el desarrollo vocacional y profesional de sus diferentes lenguajes -  música, artes visuales, danzas, teatro, multimedia, diseño, audiovisual – con sus distintas especializaciones. En ambos casos persigue como objetivos la construcción de saberes culturales socialmente productivos para la participación ciudadana, la incorporación al mundo del trabajo y la formación profesional.
El área de la educación artística favorece el desarrollo de la sensibilidad estética como así también las competencias comunicativas y expresivas, manifestándose en el proceso de producción e interpretación del desarrollo perceptivo, sensitivo, afectivo, cognitivo, social y valorativos comprometidos en el quehacer artístico. La inteligencia intuitiva e imaginaria y su adaptación a otras situaciones es considerada de importancia en la formación del ser humano, permitiéndole llegar a nuevas maneras de ver e interpretar el mundo.
Su presencia en la educación obligatoria se expresa como ineludible en tanto brinda herramientas conceptuales y metodológicas propias de su campo de conocimiento, favoreciendo el pensamiento crítico, divergente y metafórico al tiempo que contribuye a la construcción de un sujeto situado en su cultura y en su historia.
ACERCA DEL CONCEPTO DE ARTE Y SU CONSTRUCCIÓN SOCIO HISTÓRICA.
El concepto de ARTE  ah variado según las épocas y las culturas.
Las diferentes épocas constituyeron diferentes modos de entenderlo, asignándole funciones y status sociales particulares. Lo que la cultura occidental, nacida en la tradición griega ha considerado arte y producción artística ah variado en función  de las diferentes cosmovisiones de la época, relacionándose directamente con los acontecimientos políticos, económicos y culturales de la época. En este sentido el S. XVIII enfatizó la noción de arte vinculada al conocimiento sensible, perceptible de la belleza, y por ende opuesta al conocimiento científico.
Este paradigma de la modernidad conlleva valoraciones institucionalizadas en un período histórico determinado que asimilan la idea de arte “expresión”, “genialidad”, “talento”, “sensibilidad”, “originalidad”. Instala una concepción según la cual el arte es una actividad reservada a cierto tipo de personas, “los artistas”, dotados de cualidades especiales.
ACERCA DE LA EDUCACION ARTISTICA.
En el contexto del marco epistemológico precedente, la Educación Artística tiene como  finalidad  la interpretación de las producciones estético – artísticas presentes haciendo anclaje en el contexto histórico - cultural. Ello supone también facilitar a los alumnos/las la comprensión del universo simbólico en el que viven como así también participar e intervenir en él de manera crítica y autónoma. Es en estos conceptos en los que reside el valor estratégico de los aportes de la Educación Artística a la educación obligatoria y que por tanto se le destine un lugar fundamental como campo de conocimiento, coadyuvando a la construcción de un sujeto capaz de interpretar sus realidades, elegir, hacer respetar sus derechos y sentirse parte vital de una fuerza social transformadora.
Formar capacidades interpretativas supone favorecer la producción de sentido.
Si bien la función de la Educación Artística en el sistema educativo obligatorio no consiste en la formación de artistas, el conocimiento de las técnicas, los recursos y elementos formales y su organización, la posibilidad de expresarse, la voluntad comunicativa, cobran especial interés en tanto se orienten a la producción de sentido y a la comprensión, más allá de lo literal, de los diferentes discursos propios del hombre.
Por el contrario, en el campo de la educación artística, pareciera haberse vuelto natural que la actividad de “taller" corresponda al ámbito “sólo” de la práctica y que las explicaciones históricas, filosóficas, psicológicas del arte integren el ámbito de la teoría.
 Esto implica que la práctica sería sólo el hacer y la teoría un sostén extra disciplinar (proveniente de la historia, la filosofía, la psicología) que en el mejor de los casos intenta explicar algunos aspectos de esa práctica.
La Educación Artística en la contemporaneidad requiere pensarse como praxis superadora de las dicotomías de la modernidad que fundaron las representaciones sociales acerca de la educación y del arte en la actualidad, tales como teoría/ práctica; objeto/ sujeto; artista/ docente.
Propósitos de la Educación Artística
 La escuela y el equipo docente tienen la responsabilidad de:

• Brindar educación en el campo de las artes que permita la formación de sujetos críticos y reflexivos.
• Permitir el acercamiento a diversas manifestaciones artísticas de su entorno cultural, el manejo de los códigos necesarios para acceder a ellas, el derecho a disfrutarlas, y también a producirlas
• Favorecer en los alumnos/as actitudes de responsabilidad, solidaridad, respeto y cuidado por sus producciones y las de sus pares interpelándolos como sujetos de derecho, posibilitando la convivencia democrática y la construcción de la ciudadanía.
• Brindar espacios para el reconocimiento del hacer artístico superando lo lúdico expresivo: un proceso que implica esfuerzo, perseverancia, reflexión y toma de decisiones
• Incentivar la reflexión, discusión y valoración de realizaciones propias y ajenas priorizando el respeto por las diferencias culturales, sociales e históricas.
• Promover experiencias de conocimiento, disfrute y protección del patrimonio cultural.
• Incentivar las experiencias grupales (de producción y análisis) donde se valoricen los aportes individuales y se dé lugar a la explicitación de diferentes miradas e interpretaciones.
Esta área del conocimiento se fundamenta en un enfoque común que le da sentido a todas las disciplinas que la integran. Busca crear conciencia acerca del derecho que todos los niños tienen de conocer, disfrutar y apreciar el arte en sus diversas manifestaciones sin desconocer la complementariedad y especificidad de cada disciplina con sus lenguajes propios, como formas de representación, expresión y comunicación humana.
Para Fernando Hernández ,el arte es una construcción social, cambiante en el espacio, el tiempo y la cultura, que hoy se refleja en las instituciones, los medios de comunicación, los objetos artísticos, los artistas y los diferentes tipos de público.
Este sentido de la educación busca no trivializar las actividades y productos artísticos respetando la singularidad en la experiencia estética escolar y reconociendo su doble valor. Al respecto Elliot Eisner distingue dos tendencias básicas y complementarias: una educación artística extrínseca (que utiliza el arte como instrumento para la comprensión de otras áreas de conocimiento) y una educación artística intrínseca (con valor en sí misma).
La enseñanza deberá establecer un nexo entre el niño, su sensibilidad, su expresión y los conocimientos que necesita adquirir para poder desarrollar una expresión propia, libre, singular y creativa.
La expresión no es entendida como catarsis o liberación emocional sino como conquista gradual donde el alumno, a través de conocimientos y experiencias en los diferentes años escolares, aprenderá a contactarse sensorial y sensiblemente con el mundo artístico, a conocer, apreciar, reflexionar, idear, proyectar y realizar.
El arte es una forma de producción cultural del hombre que solo se puede entender considerando el contexto, intereses e intensiones tanto de la cultura de origen como de las que la recepcionan. Las obras de arte no son neutras; son un recorte que realiza el artista en base a sus historias personales, pensamientos, vivencias, contexto social, político y cultural.
La enseñanza del arte se subdivide en:
ü  Artes Visuales.
ü  Música.
ü  Expresión Corporal.
ü  Teatro.
ü  Literatura.
El presente proyecto se enfoca en el área de las Artes Visuales.
La cultura de este siglo es una cultura de la imagen. En este sentido, Eco (1996) considera que “la civilización democrática se salvará únicamente si hace del lenguaje de la imagen una provocación a la reflexión crítica, no una invención a la hipnosis”.
“La educación plástica, como promotora del desarrollo de la percepción , puede colaborar a desarrollar la capacidad de ver (descubrir cualidades y relaciones entre los objetos y los espacios) en el niño, como una actividad diferente de simplemente mirar, posibilitándole la capacidad de rescatar las potenciales explotaciones expresivas de los objetos, desarrollando, a su vez, la sensibilidad estética.”
Evaluación en la educación artística
La evaluación en arte constituye un problema aún no resuelto, porque la ponderación y valoración de las actividades artísticas está atada a cuestiones que se relacionan con el gusto, con el concepto moderno de belleza, y que se entrecruzan con las cuestiones propias de lo que significa aprender arte. Muchas veces, entonces, los criterios evaluativos no suelen estar construidos a partir de poner en evidencia si el alumno se apropió del contenido, sino a través de juicios de valor estético.
Por otra parte, al pensar el arte como expresión del inconsciente, y con un temor “de producir frustraciones en los niños”, se acepta como válida la sola realización de la tarea propuesta, sin que medie una reflexión sobre la relación entre ésta, el contenido, el grado de elaboración de la realización, etc. y sin que se expliciten al alumno los criterios que determinan ciertas y determinadas “valoraciones” de sus aprendizajes. La evaluación, entonces, como parte del proceso educativo, deberá estar ligada a los propósitos propuestos (teniendo en cuenta que no puede reducirse a la medición del rendimiento ), y deberá implicar el desarrollo de prácticas de reflexión crítica que comprometan a docentes y alumnos en el análisis de la enseñanza y en el debate acerca de los resultados.
“La evaluación es un proceso de obtención, producción y distribución de información, referido al funcionamiento y desarrollo de la actividad cotidiana en las salas, aulas, clases y salones, y la escuela, a partir de la cual se tomarán decisiones que afectarán ese funcionamiento. Más que medir, intenta comprender para poder actuar”.
 Una de las funciones primordiales de la evaluación es la retroalimentación de la tarea de enseñanza realizada por el docente, importante para él mismo, pero también para los alumnos, los padres y para la institución, esa tarea que corresponde a la práctica docente y surge de la necesidad de conocer si se está avanzando en la dirección deseada, cuánto se ha logrado y cuánto queda aún por aprender. Cuando evaluamos interpretamos rasgos y signos en los aprendizajes de los alumnos para poder enjuiciar , valorar y si fuese necesario reformular las estrategias de enseñanza.
La evaluación diagnóstica no solo se llevará a cabo al comienzo del año sino que puede ser pertinente en cualquier momento del mismo, especialmente si necesitamos introducir nuevos temas o complementar los vistos con nuevos enfoques (por ejemplo aplicar nuevas tecnologías a producciones artísticas con técnicas tradicionales).
Consideraremos relevante la recuperación de saberes o conocimientos previos de nuestros alumnos, tanto de la vida cotidiana como de instancias de aprendizajes institucionales anteriores.
Seguir el proceso de aprendizaje que lleva el alumno tiene una doble mirada: ver lo manifiesto, las producciones que realiza y observar lo oculto, esto orienta a la indagación de otros aspectos como: lo que dice individualmente, su respuesta ante problemas, su participación en el grupo, su capacidad de crear. Es importante que los alumnos sean observados en distintos espacios y tiempos (visitas a museos, realizando actividades artísticas grupales, etc.) “El objetivo de esta evaluación permanente es proporcionar la ayuda pedagógica más adecuada en cada momento”.

OBJETIVO GENERAL:

Desarrollar formas de sensibilización, apreciación, valoración y disfrute ante diferentes objetos y hechos artístico – culturales pertenecientes al patrimonio propio y de otros pueblos.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
  • Acercar herramientas al niño que le permitan, a través del arte,  interpretar el entorno del cual forma parte.
  • Favorecer el desarrollo potencial cognitivo de los niños a través del arte y la apreciación estética.
  • Reconocer, fortalecer y participar en el desarrollo emocional y creativo generado en el proceso.
  • Crear espacios de conexiones entre las distintas disciplinas del currículum.
  • Generar espacios de encuentro y de participación con la comunidad escolar.
  • Disfrutar del arte.




Bibliografía:
Programa de Educación Inicial y Primaria. Año 2008
La educación artística en la escuela. Imma Panadés, Isabel Cabanellas, …


No hay comentarios:

Publicar un comentario